INTRODUCCIÓN

INTRODUCCIÓN     (Minería informal)

LA PACHAMAMA, NUESTRA BUENA MADRE

“Al principio, Dios creó el cielo y la tierra”  –así dicen las primeras palabras de la Biblia–.  Nosotros, los cristianos, creemos que el mundo en que vivimos no es un accidente o una casualidad, sino que es la creación de Dios Padre, como una casa donde pueden vivir sus hijos.  Nuestro mundo, el Planeta Tierra, tiene todo lo que nos hace falta para poder vivir felices: el aire, el agua, la tierra fértil, los minerales, la flora, la fauna, los peces, etc.  El primer capítulo de Génesis habla de todo esto y lo hace en la forma de un poema.  No es una descripción científica, ni tampoco histórica, sino es poética, y este poema resume en pocas palabras el proceso de evolución que duró siglos y siglos, hasta formar el lugar perfecto para nosotros, los seres humanos.  Otro poema sobre nuestro mundo es aquel compuesto por San Francisco de Asís y es llamado “El Cántico al Hermano Sol”.  Veamos algunas de las cosas que dice San Francisco:

“Loado seas por toda criatura, mi Señor,

Y, en especial, loado por el hermano sol …

Y por la hermana luna, de blanca luz menor, …

Y por la hermana agua, preciosa en su candor, …

Por el hermano fuego …

Y por la hermana tierra que es toda bendición,

La hermana madre tierra que da en toda ocasión

Las hierbas y los frutos y flores de color

Y nos sustenta y rige: ¡loado, mi Señor!

Aunque los antepasados –los gentiles– en Cajamarca no conocían ni la Biblia ni tampoco el Cántico de San Francisco, sabían muy bien que la tierra es nuestra madre, es la Pachamama, y de ella depende nuestra vida.  Ahora bien, nadie que tiene un poco de sentido común va a causar daño a su madre o le va a hacer sufrir.  Pero, lamentablemente, sabemos que hay personas que, en vez de sentido común, tienen orgullo y no les interesa el bien de otra gente, ni siquiera el de su propia madre.  Buscan sólo su propio provecho y entonces cometen el pecado de no amar al prójimo  –que es igual que no amar a Dios–.  Esta clase de persona daña la tierra, su madre, contamina las aguas, tala los árboles sin sembrar otros para reemplazar aquellos que han talado.  Saca los minerales, sin preocuparse si destruyan el ambiente.

No sólo lo hacen los grandes capitalistas, sino también miles y miles de personas como nosotros  –y quizá nosotros mismos–  porque cada vez que tiramos un trozo de plástico al suelo, cada vez que cortamos un árbol sin sembrar otro, cada vez que botamos basura al río, estamos contaminando.  Si tenemos un vehículo que bota humo al aire, estamos contaminando. 

Cada vez que gritamos insultos a un prójimo, o lo tratamos con violencia, estamos contaminando.  Sí, la gente sencilla puede contaminar con golpes, insultos y tirando la basura, mientras los grandes lo hacen con bombas, con la industria y con las minas.  Pero, es muy fácil criticar y ver lo malo que cometen otros; lo que es más difícil  –y quizá más importante–  es ver lo malo que cometo yo.  Entonces, en conclusión, si queremos que no haya contaminación de la madre tierra, cada uno tiene que tomar conciencia de cómo actúa.

La belleza de la CREACIÓN DEL  GÉNESIS  se ve amenazada por un ANTIGÉNESIS que a la letra dice:

Al fin el hombre acabó con el cielo y con la tierra.

La tierra era bella y fértil,

la luz brillaba en las montañas y los mares

y el espíritu de Dios llenaba el universo.

…

El hombre dijo:

Reunamos nuestras fortunas todas en un lugar

Y creemos instrumentos para defendernos.

La radio para controlar el espíritu de los  hombres,

Los uniformes para  dominar  las almas de los hombres.

Y así fue…

Muchas veces  varios poderes se confabulan para acabar con el justo trato a los pobres agricultores que están de lado de la Pachamama. Se contamina criminalmente sus tierras. Nadie los escucha, a demás por defender  sus tierras, su medio ambiente terminan encarcelados, por que el poder económico y los uniformes siempre se impondrán frente a unos humildes campesinos de poncho y sombrero.

Todo lo que se haga fuera de la voluntad de Dios, redunda en contra de los humanos  es eso lo que estamos viviendo hoy día.

Finalizaría  este pequeño fragmento realizando las siguientes preguntas: 

¿Quién creó la tierra y por qué?

¿Quiénes contaminan la tierra?

¿Cómo contaminan la tierra?

¿Qué puedo hacer yo para que haya menos contaminación?

Profesor Gilberto Tuñoque Sánchez

I.E. “Nuestra Señora del Rosario”
Cajabamba- Cajamara-Perú